Reciclando cambiamos el Mundo

Sólo cuando hayas cortado el último árbol, sólo cuando hayas contaminado el último río, sólo cuando hayas pescado el último pez, sabrás que el dinero no se puede comer.

GENERANDO CONCIENCIA




PAPEL: USO INDEBIDO. PROCESO. CONSECUENCIAS AMBIENTALES DEL USO INDISCRIMINADO. CONSEJOS ÚTILES.
El mal uso del papel en oficinas, comercios, hogares, industrias y, en cualquiera de los ámbitos en que es utilizado, trae aparejadas diversas consecuencias para el medio ambiente y para el futuro inmediato de nuestro planeta.

Su utilización es tan habitual y corriente que casi nadie se pregunta de dónde viene, qué proceso requiere su fabricación, qué consecuencias ambientales acarrean las papeleras, cuánto líquido es necesario para hacer una hoja de papel, cuánto cloro se utiliza, etc.

Al igual que con tantas costumbres de nuestra sociedad moderna y consumista, no se toma consciencia real de los efectos y consecuencias de nuestros hábitos más cotidianos y arraigados.





Hoy quiero contarles un poco cuál es el proceso por el cual un árbol se transforma en la resma de hojas que utilizamos a diario.

Debemos saber que una sola hoja de papel blanco requiere 370 cm3 de agua limpia para ser producida.

Con sólo pensar en las miles de hojas que he visto tirar y malgastar en mi vida, es inevitable que un escalofrío atraviese todo mi cuerpo.

Fabricar mil kilos de papel blanco implica un consumo de 100.000 litros de agua. 

De ellos, un 10% altamente contaminado se vierte a los ríos.

La industria papelera se ubica entre las industrias más contaminantes del Mundo.

La alta toxicidad de sus métodos industriales se debe, fundamentalmente, al proceso de blanqueo con Cloro, que constituye la auténtica pesadilla de la industria papelera.

Un oficinista promedio imprime unas 10 mil hojas al año, siendo que un árbol sirve para producir 16 resmas de papel.

¿Cuántas hojas has arrojado innecesariamente a la basura?

¿Cuántas hojas has malgastado a lo largo de tu vida?

Imprimir por imprimir es uno de los tantos atentados inconscientes contra el medio ambiente.

Tenemos que entender que sólo depende de nuestra voluntad evitar ese mal uso del papel implementando algunos mínimos ajustes en nuestros hábitos de uso y consumo.

La demanda de papel es cada vez más alta. En un día típico, una persona manipulará una gran cantidad de papel al realizar sus actividades cotidianas, como por ejemplo, al leer el periódico matutino, al recibir su correo, al imprimir algunas copias en la fotocopiadora, al recibir el almuerzo que viene envuelto en papel, al utilizar las servilletas de papel, al transportar las cajas de cartón en las que vienen las cosas que compramos incluyendo los alimentos, cada vez que lee una revista, etc.

Un estadounidense promedio utiliza unos 340 kilos de papel al año. Los ciudadanos norteamericanos son quienes más papel consumen en el mundo – casi un tercio del papel que se produce en todo el mundo.




Veamos el camino que recorre el papel desde que son talados los árboles hasta que llega a nuestros hogares y oficinas.

El papel puede provenir de tres fuentes:

1) Árboles: Los árboles de madera dura como los robles y el arce son utilizados para producir el papel que usamos para escribir, mientras que la madera blanda se utiliza para producir el papel para empaquetados, el cartón, etc. 

Aproximadamente el 15 por ciento de estos árboles son plantados para ese propósito en bosques que vuelven a replantarse, o sea, en “granjas de árboles”. Lamentablemente, el resto, (75% aproximadamente), proviene de bosques que no son reforestados, sino que tan sólo se desintegran, mueren y desaparecen a escalas inimaginables.

El gran negocio del papel trae aparejada la tala ilegal e indiscriminada de bosques y selvas tropicales en todo el mundo, principalmente en Sudamérica.

2) Sobras: El material de desecho (como el aserrín) de las madereras que cortan los árboles se recolecta y se utiliza para manufacturar papel; generalmente, para fabricar cartón, papel de embalaje y productos desechables.

3) Papel reciclado: Así se le llama al papel que ya hemos utilizado y desechado y que es reprocesado.

En la actualidad el porcentaje de venta y de uso de papel reciclado a nivel mundial es mínimo.

Podemos notar que la mayoría del papel no es marrón, como el color de la madera. Eso es indicativo de uno de los procesos involucrados en la fabricación del papel –el Blanqueo– considerado uno de los procesos industriales más contaminantes que existen.

Una vez que los árboles son talados y llevados a la maderera, la madera se muele hasta quedar desmembrada en pequeños pedazos que son calentados en un tanque con agua y productos químicos para producir la ‘pulpa’, que es la masa formada por los trozos individuales de celulosa que constituye la materia base de la que está hecha el papel.

Antes de que la pulpa sea calentada y secada, se agregan a la mezcla materiales como almidón y arcilla que le otorgan brillo y resistencia al papel.

Finalmente, el papel es blanqueado utilizando Hipocloríto de Sodio, que es la sustancia que comúnmente denominamos “lejía” o “lavandina” en su utilización doméstica. Se suele utilizar también Peróxido de Hidrógeno, que es más seguro y menos contaminante.

Luego de todo el proceso de fabricación, los productos de papel suelen ingresar en las cuatro categorías siguientes:

a) Contenedores: Casi el 30 por ciento de todos los productos de papel está constituido por el cartón corrugado que se utiliza para los embalajes y los envíos postales.

b) Papel de escribir/imprimir: En segundo lugar se encuentra el papel que se cree es el de uso más común. Al menos en los Estados Unidos, esta aplicación constituye alrededor del 30 por ciento de todos los productos de papel.

c) Cajas: Casi el 20 por ciento de los productos de papel terminan como cajas de cartón, ya sea el cartón de la leche, del vino en tetrapack, de las cajas de zapatos, etc.

d) El 20 por ciento restante de la producción es compartido por el papel utilizado para los periódicos, las revistas, los pañuelos, las servilletas, el papel higiénico, etc.

Luego de conocer este proceso, es de esperar que desarrollemos la debida consciencia y comencemos a utilizar responsablemente el papel que manipulamos a diario, como así también, que nos esforcemos en consumir la mayor cantidad posible de papel reciclado y contribuyamos a reciclar el papel.

En muchos países, la gente de bajos recursos se dedica a recolectar cartón y papel por las calles para llevarlos a las recicladoras. Sería interesante que al menos les hiciéramos más fácil su trabajo separando los desechos de papel en bolsas individualizadas para tal efecto.





Por último quiero dejarles algunos consejos útiles para reducir el uso inconsciente e indiscriminado de papel:

1. Pensar antes de imprimir. Todos debemos modificar nuestra manera de ver el papel y de relacionarnos con él. Antes de imprimir cualquier cosa, preguntémonos si es realmente necesario.
2. Usar siempre la presentación preliminar. El empleado de oficina promedio imprime 6 páginas al día que no sirven para nada, lo cual se puede solucionar si antes hemos visto la presentación preliminar. Un programa que ayuda a ello es el llamado Green Print, un paquete que automatiza el proceso.
3. Imprimir en PDF. Una gran ayuda es digitalizar los documentos en formato PDF, los mismos que podemos enviar y tener a mano en cualquier momento, sin descartar cualquier otro formato que creamos conveniente. El PDF ocupa menos espacio y puede representar un gran ahorro de papel.
4. Comprar y utilizar sólo papel reciclado.
5. Fomentar el uso del correo electrónico para comunicaciones internas y externas.
6. Guardar y distribuir los documentos en formato digital, compartiendo información y aprovechando las posibilidades de Intranet, correo electrónico, etc.
7. Revisar los textos en pantalla antes de imprimir, ortografía, márgenes, “vista previa”, reducción del tamaño de la fuente, etc. para evitar textos con errores.
8. Ajustar los documentos para que quepan dos páginas en una carilla si es imprescindible imprimir documentos de consulta.
9. Fotocopiar e imprimir a doble cara, reduce el uso de papel de impresión a exactamente la mitad.
10. Reutilizar el papel ya impreso en una cara para documentos internos, blog de notas, borradores, envío de faxes, etc.
11. No configurar el fax con página de presentación, puesto que así se utiliza menos papel y la transmisión es más rápida.
12. Disponer contenedores específicos para la recogida y posterior reciclado del papel ya inservible.
13. Optar siempre por utilizar en nuestro hogar las servilletas tradicionales de tela que se usan y se lavan, antes que las de papel, que se usan y se tiran.






El papel se compone de fibras vegetales, es decir, de materia orgánica, o lo que es lo mismo, de elementos que están o han estado vivos.

Por este motivo debemos aprender a valorar la importancia del papel como exponente y resultado de un proceso de fabricación que ha tenido como consecuencia la muerte de un ser vivo: EL ÁRBOL.

De igual modo que confundimos dinero con bienestar, de la misma manera que pensamos que al mover dinero manejamos posibilidades, debemos concientizarnos de que, al utilizar papel, aprovechamos parte de la riqueza viva del planeta y, si no la cuidamos, corremos el riesgo de perderla.

La repercusión que tendrá en un futuro la sobreexplotación de los recursos madereros la sufrirán sólo las próximas generaciones.

Este es nuestro desafío más importante: Ser realmente conscientes de que la abundancia de hoy puede ser la escasez mañana y, que ese mañana está muy cerca.

CON EL USO RESPONSABLE DEL PAPEL Y CON SU RECICLADO AHORRAMOS AGUA y ENERGÍA, NO CONSUMIMOS DERIVADOS DEL PETRÓLEO, DISMINUIMOS CONSIDERABLEMENTE LA CONTAMINACIÓN DE CUENCAS Y RÍOS y EVITAMOS LA DEFORESTACIÓN Y LA TALA INDISCRIMINADA DE ÁRBOLES.

* Recuerden que 15 Km2 de selva tropical desaparecen de la faz de le Tierra cada minuto todos los días; cada día.

DEBEMOS tomar consciencia del verdadero impacto que tienen en el medio ambiente y en el futuro del planeta nuestros hábitos inconscientes e indiscriminados.

Es muy sencillo aportar nuestra cuota de consciencia y de ayuda, haciendo unos mínimos ajustes en nuestros hábitos y nuestra rutina diaria, cuidando el papel y no malgastándolo.

Pensemos.
Reflexionemos.

Tomemos Consciencia.
Difundamos el Mensaje.


Comienza una NUEVA ERA.
Es el TIEMPO de la UNIÓN.
Es el TIEMPO del CAMBIO.
Es el TIEMPO de la CONSCIENCIA GLOBAL.
Es el TIEMPO de la ACCIÓN.

Es TIEMPO de Ser UNO.
Y Jamás Te Olvides Que,
¡¡¡ENTRE TODOS, PODEMOS!!!

AYÚDAME/ AYÚDATE/ AYÚDALO

RECICLADO CASERO DE PAPEL. Explicación - Beneficios - Contribución.

Como ya hemos hablado, sabemos perfectamente que el mal uso del papel en oficinas, comercios, hogares, industrias y, en cualquiera de los ámbitos en que es utilizado, trae aparejadas diversas consecuencias para el medio ambiente y para el futuro inmediato de nuestro planeta. 

Una vez que conocemos el proceso que se lleva adelante para que tengamos el papel que utilizamos a diario en nuestros hogares y oficinas, nos damos cuenta de la importancia que tiene para el futuro de nuestro Planeta, que comencemos a vivir de manera acorde a las necesidades ambientales de nuestro presente. 


Asumir de una vez y para siempre que nuestros actos más cotidianos, individuales y personales son determinantes, es un paso fundamental que debemos dar para comenzar a cambiar el rumbo que llevan las sociedades envueltas en el consumo desmedido y en el abuso sin control de todos los recursos naturales que quedan vivos en nuestros ecosistemas.


Consumir papel de manera conciente y responsable, y utilizar la mayor cantidad posible de papel reciclado, es muy importante y se transforma en un GRAN aporte al futuro.

Hoy quiero dejarles una forma más de contribuir con el futuro y el medio ambiente. 

Hoy voy a entregarles un breve y sencillo curso donde aprenderán a RECICLAR en sus hogares todo el papel que sobra de diarios, revistas, fotocopias, cartones y muchas cosas más.


Con el reciclado casero de papel estamos contribuyendo activamente con el cuidado del medio ambiente, evitando la tala indiscriminada de árboles, ahorrando agua y eliminando residuos.

El papel reciclado casero es sin duda uno de los principales y más posibles medios de reciclado que se encuentra a nuestro alcance.




RECICLADO CASERO DEL PAPEL

¿Qué necesitamos?


- Agua: la cantidad dependerá del resultado que busquemos (láminas más finas o más resistentes). 

- Papel: vale cualquier tipo, pero si usamos diferentes variedades y texturas el efecto será mucho más bonito. Podemos utilizar revistas antiguas, periódicos, papel de escritura o incluso cartón.
- Batidora/Licuadora: se utiliza para triturar y mezclar el papel con el agua y conseguir la masa final. La licuadora que usamos para cocinar resulta suficiente.
- Recipiente de plástico: (Cualquier recipiente grande y con buena profundidad)

- Bastidor: un marco de madera con una malla que podemos comprar o hacer nosotros mismos. El tamaño determinará el de la hoja de papel y tiene que caber dentro del recipiente de plástico descripto en el punto anterior.





- Prensa: para conseguir una hoja plana durante el secado debemos mantenerla con presión. Bastará con unos libros pesados y unas láminas de plástico (o bolsas) para evitar que la humedad de la masa moje los tomos. 
- Tela de algodón: La tela tiene que ser de mayor tamaño que el bastidor.

¿Qué papeles podemos reciclar?
Los papeles más aconsejables son:
Papel de fotocopias, papel tisú, cartulina blanca o de color, papel secante, papel madera, papel de diario, hojas de cuaderno o carpeta, cartones protectores de cajones de frutas, envases de cartón de presentación de huevos, cartones corrugados etc. 

Papeles que no se pueden utilizar: 
No hay que utilizar papeles engomados, ni plastificados, carbónicos, papel vegetal, de calcar, papeles metalizados o celofán. 

RECICLADO
Pasos a seguir.

1. El primer paso es cortar el papel en trozos muy pequeños.Recuerda que, mezclando distintos tipos, conseguirás un producto más atractivo.

2. Sumergir los trozos en agua y déjalos en remojo en el recipiente durante 1 ó 2 horas, hasta que el papel comience a tener consistencia de pasta. Si el agua está caliente, el tiempo de espera se reduce. Cambia el agua a medida que el papel va soltando la tinta para que el color final sea más uniforme.

3. Tritura la mezcla en la batidora/licuadora hasta conseguir una masa homogénea de textura suave y cremosa. Resulta conveniente hacerlo por tandas para desmenuzar los trozos bien. Si quieres, tritura algodón con la pasta para lograr una consistencia mayor.

4. Una vez que tengamos la pulpa (la masa conseguida en el paso anterior) la vertemos de nuevo en el recipiente. Si está muy espesa, el resultado será parecido al cartón. Si quieres que se vaya afinando puedes añadir agua hasta conseguir el grosor y efecto que desees.

5. Luego introduce el bastidor en esta pasta consiguiendo que se deposite en la malla la cantidad suficiente para cubrir toda la superficie. El grosor de la capa determinará el grosor del papel final.

6. Con la malla cubierta de la pasta de papel, sácala del recipiente y deja que escurra el agua sobrante. Cuando comience a secarse por la pérdida del líquido, vuélcalo con mucho cuidado sobre una tela de algodón.

7. Para terminar, el papel tiene que secarse completamente. Utiliza libros o cualquier objeto que haga las veces de prensa para hacer presión y conseguir así que la superficie sea más lisa.

Para acelerar el proceso de secado, que suele durar 12 horas, tiende el paño con el papel dentro (cuando ya esté algo seco para evitar que pierda la forma) y pasale la plancha con sumo cuidado sobre el papel. Nunca directo sobre el papel, siempre usando la tela como protección.

8. Una vez que esté seco y prestando mucha atención, separamos el papel de la tela con mucho cuidado y delicadeza para que las partes que puedan estar pegadas no se rompan. Ayúdate de una espátula si es necesario.

* Para agregar brillo al papel, le puedes incorporar brillantina o trocitos de láminas metalizadas. 
* Para escribir sobre el papel hay que rociarlo previamente con laca en aerosol.
* Para teñirlo se pueden utilizar anilinas, acrílicos, temperas o colorantes vegetales. Estos se incorporan al agua de la batea.
* Recuerda que siempre es posible añadir color al papel durante la fabricación para hacer más divertido el producto final. Pueden ser tintes vegetales, hechos en casa hirviendo plantas por ejemplo, o tintes químicos como los que utilizamos para teñir tela. Cualquiera de los dos tipos se añade a la masa de papel disueltos en agua.

También conseguirás diferentes efectos añadiendo tela, lana, especies, flores. Esto debes hacerlo antes de pasar a secar el papel en el bastidor. Todo dependerá de nuestra creatividad y del uso final que queramos darle. 




Recordemos SIEMPRE que el papel se compone de fibras vegetales, es decir, de materia orgánica, o lo que es lo mismo, de elementos que están o han estado vivos.

Por este motivo debemos aprender a valorar la importancia del papel como exponente y resultado de un proceso de fabricación que ha tenido como consecuencia la muerte de un ser vivo: EL ÁRBOL.

De igual modo que confundimos dinero con bienestar, de la misma manera que pensamos que al mover dinero manejamos posibilidades, debemos concientizarnos de que, al utilizar papel, aprovechamos parte de la riqueza viva del planeta y, si no la cuidamos, corremos el riesgo de perderla. 

La repercusión que tendrá en un futuro la sobreexplotación de los recursos madereros la sufrirán sólo las próximas generaciones.Este es nuestro desafío más importante: Ser realmente conscientes de que la abundancia de hoy puede ser la escasez mañana y, que ese mañana está muy cerca. 

CON EL USO RESPONSABLE DEL PAPEL Y CON SU RECICLADO AHORRAMOS AGUA y ENERGÍA, NO CONSUMIMOS DERIVADOS DEL PETRÓLEO, DIsMINUÍMOS CONSIDERABLENTE LA CONTAMINACIÓN DE CUENCAS Y RÍOS y EVITAMOS LA DEFORESTACIÓN Y LA TALA INDISCRIMINADA DE ÁRBOLES.

Recuerden que 15 Km2 de selva tropical desaparecen de la faz de le Tierra cada minuto todos los días; cada día. 

DEBEMOS tomar consciencia del verdadero impacto que tienen en el medio ambiente y en el futuro del planeta nuestros hábitos insconscientes e indiscriminados. 

Es muy sencillo aportar nuestra cuota de consciencia y de ayuda, haciendo unos mínimos ajustes en nuestros hábitos y nuestra rutina diaria, cuidando el papel y no malgastándolo.

Pensemos. 

Reflexionemos. Tomemos Consciencia. 

Difundamos el Mensaje. 

Comienza una NUEVA ERA. 

Es el TIEMPO de la UNIÓN. Es el TIEMPO del CAMBIO. 
Es el TIEMPO de la CONSCIENCIA GLOBAL. Es el TIEMPO de la ACCIÓN. 
Es TIEMPO de Ser UNO. 
Y Jamás Te Olvides Que, 

¡¡¡ENTRE TODOS, PODEMOS!!! 

AYÚDAME/AYÚDATE/AYÚDALOS 

Te gustó lo que leíste? 
Quieres saber más?
Quieres participar? 

Déjanos tu opinión personal al final de la nota.

No hay comentarios:

Publicar un comentario